LA PROMESA Preview Capítulo 679 Viernes 19 de Septiembre LEOCADIA descubre a CURRO y ÁNGELA
Yo no sé a vosotros, pero a mí los días se me pasan muy rápido
El tiempo en la finca de La Promesa parece transcurrir con una velocidad que descoloca a todos sus habitantes, y lo que parecía ser una semana tranquila, se convierte en un cierre lleno de tensiones, secretos destapados y giros inesperados que prometen dejar huella en cada personaje. En este avance, nos adentramos en todo lo que sucederá mañana, en el episodio que cerrará la semana y que no dejará indiferente a nadie.
Manuel, inquieto como pocas veces se le ha visto, no logra apartar de su mente una sensación extraña que le corroe por dentro: está convencido de que Jimena, su mujer, le está ocultando algo importante. La desconfianza crece en su interior hasta el punto de que no puede seguir callando. Por eso, decide enfrentarla directamente, decidido a descubrir la verdad de una vez por todas. Y, para su sorpresa —o quizás no tanta, porque su intuición ya lo había advertido—, Jimena no se anda con rodeos. Sin rubor ni arrepentimiento, le confiesa que fue ella misma quien robó los planos de la caja fuerte. La revelación cae como un jarro de agua fría sobre Manuel, que no entiende cuál ha sido el verdadero motivo detrás de una acción tan grave. ¿Qué pretende obtener Jimena con ello? La intriga se intensifica y deja la incógnita abierta, generando un nuevo conflicto en la pareja.
Avance ‘La Promesa’: Un descubrimiento peligroso, en el capítulo 679 (19 de septiembre)
Mientras tanto, Pía se ve obligada a cargar con una pesada cruz: la orden de trasladarse a Aranjuez. La decisión la llena de tristeza y pesar, pues sabe que este destino significa separarse de todos aquellos a quienes aprecia dentro de la finca. Ricardo, siempre fiel y dispuesto a luchar, le propone resistirse y contarle a Manuel la situación para encontrar apoyo. Pero Pía, consciente de lo mucho que su señorito ya tiene en la cabeza, prefiere callar, guardándose el dolor para no molestarlo más. Lo que ella ignora es que Manuel, por su parte, ya está consumido por la preocupación: confió en que Cristóbal sabría manejar un asunto delicado, pero teme que esa confianza haya sido un error y que, cuando decida intervenir, sea demasiado tarde para remediarlo.
En paralelo, Catalina sigue manteniendo una postura firme y distante frente a las revueltas que sacuden la finca. A pesar de los comentarios de su familia, ella no está dispuesta a mover un dedo para frenar los disturbios. Defiende con uñas y dientes su posición, pero pronto se verá obligada a replantearse su actitud cuando llega a sus manos una carta de enorme relevancia. Ese mensaje inesperado tiene el potencial de convertirse en un punto de inflexión, y la presión aumenta cuando Alonso, preocupado por el eco que estas rebeliones están teniendo en la Corona, le pide a su hija que sea ella quien arregle el problema de inmediato. Para Catalina, la exigencia paterna supone un desafío mayúsculo, y por eso decide emprender un viaje junto a sus hermanos, un trayecto que estará lleno de obstáculos y que pondrá a prueba tanto su carácter como la unión familiar.
Otro de los momentos más emotivos lo protagoniza Ángela. Después de días encerrada en su habitación, consumida por el miedo y las dudas, encuentra el coraje de abrir la puerta y salir, demostrando una valentía que hasta ahora parecía dormida. Sin embargo, la reacción de su madre, Leocadia, no es la que la joven esperaba. En lugar de brindarle apoyo, comprensión y palabras de aliento, Leocadia responde con frialdad, con un comportamiento que solo consigue abrir aún más la brecha que ya existía entre ellas. Lo que Ángela desconoce es que su madre no actúa movida por el desprecio, sino por el temor oculto hacia Lorenzo y por el pacto secreto que en su día selló con el capitán. Este silencio, lejos de protegerla, corre el riesgo de condenar la relación madre-hija al resentimiento y la desconfianza.
En medio de ese ambiente tenso, Curro y Ángela siguen aferrados a su historia de amor. Viven su relación en secreto, aprovechando cada instante robado, cada mirada cómplice, cada momento de intimidad que logran arrancarle al destino. El vínculo entre ellos se fortalece en la clandestinidad, pero también los pone en peligro. Y es que las palabras de Lorenzo han dejado a Leocadia con una espina clavada: decide investigar por su cuenta y pronto descubre la verdad. La confirmación le llega cuando sorprende a su hija conversando con Curro sobre sentimientos y relaciones. En ese instante, no le quedan dudas de que Ángela mantiene un romance con el joven lacayo. Este descubrimiento la enfrenta a una dura decisión: ¿respetar la libertad de su hija o interponerse en una relación que ella no aprueba?
En otro rincón de la finca, la doncella, que arrastra el peso de sus errores pasados, decide dar un paso al frente y disculparse con Rómulo. Pero lo hace a su manera, sin el tono ni las palabras que él esperaba escuchar. La disculpa, aunque pronunciada, no logra sanar la herida, y el desencuentro entre ambos continúa. Lo que parecía ser una oportunidad para recomponer la confianza, se convierte en una nueva ocasión perdida que deja un poso de tristeza y frustración.
La Promesa’, avance del capítulo 679 del viernes 19 de septiembre
Mientras tanto, en las cocinas, el aire se llena de ilusión y nerviosismo gracias a Simona y Candela. Ambas mujeres no pueden contener la emoción que sienten al enterarse de la posible boda de Toño y Enora. La idea de la celebración, de la unión y de la felicidad compartida, despierta en ellas un entusiasmo contagioso. Tanto es así, que, olvidando la discreción, deciden compartir los planes de la pareja con Samuel. Sin embargo, en ese arranque de sinceridad, Simona rompe la promesa que le había hecho a su hijo: guardar el secreto. Esa falta de prudencia amenaza con empañar la alegría inicial y plantea la duda de si, al final, su indiscreción podría tener consecuencias en los planes de boda.
Con todo este cúmulo de tensiones, ilusiones y secretos, el episodio promete ser un cierre de semana de infarto. La Promesa sigue demostrando que cada día es una nueva batalla para sus personajes, que oscilan entre la lealtad y la traición, entre el miedo y la valentía, entre el amor y el deber. Nada está escrito, y cada decisión tomada abre un abanico de consecuencias inesperadas que nadie puede prever.
Este avance nos recuerda que en la finca nada es lo que parece: detrás de cada sonrisa hay un secreto guardado, y detrás de cada decisión hay un precio que tarde o temprano habrá que pagar. Mañana, todas estas tramas se entrelazarán para ofrecernos un capítulo cargado de emociones, donde cada personaje quedará marcado por las elecciones que haga y por las verdades que se atreva —o no— a enfrentar.